Él respondió rápidamente: "Llamaré a mi padre para ver cuándo está disponible y te aviso".
Milena sostuvo el teléfono, sus dedos acariciando las palabras en la pantalla, sintiéndose tranquila.
Preguntar y responder, quizás esta era la mejor manera de relacionarse.
*
Manolo, tras lograr subir a Patricia al auto con gran esfuerzo, apenas se sentó al volante cuando recibió el mensaje de Milena. Miró el rostro de la mujer en el retrovisor y respondió rápidamente.
Cuanto mejor y más estable fuera su relación con Milena, más segura estaría la mujer del asiento trasero.
No la amaba, nunca pensó en casarse con ella, pero quería mantenerla a su lado toda la vida.
Si tuviera que encontrar una razón para retenerla, sería que no soportaba que su corazón solo perteneciera a Santiago.
Después de enviar el mensaje, llamó a su madre.
—Manolo, ¿pasó algo para que llames tan tarde? —la voz de Beatriz sonaba preocupada.
—Mamá, hoy me reuní con la señorita Suárez y nos llevamos bien. ¿Podrían tú y papá co