Apreté las manos sobre la mesa.
Nyx chasqueó la lengua dentro de mí, con un tono punzante.
"Ese tipo es un idiota"
"No empieces" murmuré entre dientes.
"¿Qué? Solo digo lo obvio. Sabe que su reacción fue poco común, sobre todo en nuestra situación, pero prefiere negar que nosotras también podemos sentirnos confundidas. Y aún así…" Nyx rió suavemente, como saboreando algo "…a nuestro corazón le gusta, ¿verdad?"
Me levanté de golpe, como si el movimiento pudiera callarlo.
"Cállate" dije más fuerte de lo que quería, mi voz rebotó en la cocina vacía.
Apoyé la frente en la puerta del mueble más cercano, sintiendo el calor arder en mis mejillas.
Al salir, me topé con Cillian.
"¿Cómo estás?" Pregunté, intentando sonar casual.
Se detuvo un momento y me miró, como si quisiera decir algo, pero finalmente no lo hizo. Solo respondió, frío
"Bien."
Y siguió su camino como si yo no existiera.
Era… incómodo. No podía controlar ser su compañera, no podía culparme por ello.
Seguí caminando por la man