Alice suspiró, sintiendo cada latido de su corazón. Estaba completamente atrapada en aquella mirada verde bosque, una mirada profunda que la dejaba aturdida. De manera inevitable, comenzó a imaginar el futuro a su lado, un futuro que hace mucho había dejado de soñar, por creer que era imposible. Las palabras de Jamie resonaban entre ellos. "Finalmente te tendré" susurró. Y ella quiso creer que eso era posible con todas sus fuerzas.
Alice sintió que sus rodillas flaqueaban, pero de repente su mano sujetó la suya, apretándola con fuerza a través de las barras de la reja. Ella levantó su mirada hacia el macho frente a ella.
Jamie parecía contener todo un mundo en aquella mirada, manteniéndola en el mismo lugar. Había mucha emoción en sus ojos, y eso hizo que su corazón latiera descompasado.
Ella podía sentir el calor de su mano irradiando a través de ese toque, recorriendo todo su cuerpo y calentándola. Eso la hizo sumergirse en sueños de un futuro incierto y peligroso.
En ese instante,