El auto llegó al gran centro comercial en el corazón de la ciudad.
Valeria le pidió al chofer que esperara afuera y empezó a recorrer los pisos del centro comercial junto a Rebeca. Una vez que estuvieron solas, Rebeca se abrió con Valeria:
—La verdad es que no quiero casarme con Antonio, pero en la familia Soler, pocas veces uno decide sobre su matrimonio.
—¿Tu papá todavía quiere que te cases con él, a pesar de todo lo que está pasando la Familia González? —Valeria no pudo evitar preguntar.
Ella había tenido algunos encuentros con Ignacio y sabía que era alguien que valoraba mucho el poder y la influencia. La Familia González estaba en bancarrota, ¿cómo podría Ignacio seguir interesado en Antonio?
—Hoy al mediodía me encontré con Mau, no solo para comer… —Rebeca comenzó a decir, pero se detuvo para toser, llevándose la mano al pecho.
Valeria dejó de mirar las tiendas y ayudó a Rebeca a sentarse en una silla cercana. Al abrir su bolso, Valeria vio varios frascos de medicina. Rebeca sac