En ese momento, el gerente de relaciones públicas llamó, exasperado, diciendo, —Sergio, se ha filtrado en línea un video de la secretaria Rocío con un niño pequeño en el hospital, así como el video de la cena anterior. Ya ha alcanzado varios puntos calientes...

—¿Necesitas que te enseñe cómo manejar esta noticia?—, Sergio tiró de su corbata con irritación y dijo fríamente, —Si no puedes manejar las noticias, ¡deja de trabajar!

Después de colgar, su enojo creció y unos segundos después llamó a Rocío Morales.

—Sergio...

—Rodrigo está enfermo; deberías haber llamado al médico de la familia o enviar a una empleada al hospital en lugar de llevártelo y hacer alarde en público. ¿Crees que no tengo suficientes problemas?—, dijo Sergio sombríamente, —¡Todo el internet está lleno de videos de ti con el niño!

Al escuchar esto, Rocío se alarmó en el otro extremo del teléfono, —No pensé que alguien me estaba siguiendo...

—Solo esta vez.—, Sergio la advirtió. —Grupo Hernández es mi vida y alma; si