"Las almas que se encuentran y se reconocen nunca se sueltan. Ni con la distancia, ni con el silencio, ni con el tiempo, ni con las vueltas que da la vida"

Narrador omnisciente

Ya era hora de que Fumiko se retirará con su nueva "familia" hasta que cumpliera los 17 años por que el joven  futuro alpha era mayor que ella y en pocos años se  transformaría  y al ya saber de su Luna y tenerla cerca   estaría  insoportable y podía incluso hacerle daño a la pequeña 

El día anterior pasaron todo el día juntos ellos dos jugando, hablando o simplemente disfrutando de la compañía del otro en un silencio delicioso 

Mientras el padre de Oshin Itreque se encargaba que los que tuvieran a la Luna de su hijo cuidaran bien  de ella y que no sufriera ningun topo de abuso, daño o algo parecido y que su hijo matara a alguien por eso 

El chico estaba con ella en el jardín, el estaba recostado en las pequeñas piernas de Fumiko con los ojos cerrados  mientras ella le acariciaba el cabello con una enorme sonrisa en su rostro mientras el disfrutaba de el toque de ella. Era algo digno de admirar como la pureza he inocencia de ese amor que brotaba de ellos y gritaba "inseparables" por todos lados 

Los encargados del lugar ya estaban afuera del orfanato con la nueva familia de Fumiko y con sus maletas mientras que el padre iba a buscar a la niña y a su hijo para que estos se despidieran 

Llegaron donde ellos y al señor Mael Itreque le pareció una hermosa y tierna la escena, y miro en la mirada de la niña un enorme sentimiento de amor tan puro como el agua que   viene desde el rocío arriba  mientras estaba tan concentrada en el chico de sus piernas, el se les acerco y ella subió la mirada de manera instantánea al sentir la presencia de el cerca

Oshi- lo llamo ella mirando aún al padre  del joven, el gruño por que no queria abrir sus ojos para seguir perdido  en su mundo de sueño guiado por el aroma de ella, ella rio por esa respuesta- tu papá -dijo ella luego de cortos segundos observandolo quejarse, el abrió sus ojos en medio de bufidos y gruñidos

¿Qué pasa papá?- dijo en tono molesto el sin levantarse del lugar donde estaba por que se sentía cómodo 

Ya es hora- dijo el mirando a su hijo de esa  manera tan tranquilo  ofreciéndole aún extraña la manera de el con ella puesto siempre tendía a ser bastante inquieto y quejoso por todo, el chico sonrió de manera amplia cuando escucho eso  y se levanto del suelo 

Fumiko es hora de irnos- dijo el a la niña  de manera emocionada, el padre fruncio el ceño en desconcierto

¿Irnos?- pregunto el señor a su hijo, mientras el le ayudaba a la pequeña a levantarse del suelo tomando su mano 

Si, ira a la manada con nosotros- dijo tomando la mano de la niña con más devoción mirando de manera desafiante al padre , el padre suspiro un tanto consternado 

Ella no ira a la manada, Oshin- dijo el padre deteniendo los pasos de el hacia el exterior del lugar 

Pero tu dijiste que ella era mi Luna y tenia que estar con migo siempre- dijo molesto el de  manera defensiva ante la declaración de su padre 

Y asi es- aseguro este mirando con cierto desconcierto a su hijo- Pero ella es una niña y tu un joven...- dijo de manera cautelosa a su hijo, el joven fruncio el ceño en señal de desconcierto-  Ella se reencontrara contigo cuando cumpla 17 años, haata entonces...- explico este a el, la niña sólo nos miraba sin saber que decir

Me niego- gruño Oshin aferrandoce a la mano de Fumiko, esta se colocó un poco más atrás de Oshin por la promesa que antes le había echo, echa tenía toda la devoción en que el le protegerla,  sus ojos  se empezaron a llenar de lágrimas sin saber la razón - Ella ira con migo a la manada...- siguió el en tono molestó, la niña que veía toda la escena sin entender absolutamente nada, pero si que era consiente que se separaría de Oshin, empezaron a deslizarse las lagrimas por sus mejías, gruesas lágrimas escaparon de sus ojos mientras tomaba mas fuerte la mano de el he intentaba  ocultarse tras este con cierta aflicción y miedo

Entonces...- dijo bajo ella llamando la atención de ambos - ¿ya no te veré, más?- pregunto con miedo y la mirada gacha, Oshin gruño más al padre quien miraba impresionado los ojitos apagados de la niña, nada que ver a lo que había observado minutos antes, puesto jamás había observado que se formará una unión asi de rápido y a simple vista fuerte , callendo a la cuenta que  no había servido de nada lo que tenía planeado, según para evitar esa situación  lo había adelantado todo ya que al ser su hijo que lleva en sus   genes alpha el apego entre ambos sería mayor pero no había servido de nada 

No hasta que sea el momento- dijo el padre de   manera  sería y neutra, la encargada de los tramites de la "compra" y de la "apartada" tomo de la cintura a la  pequeña niña seprandola  de Oshin para llevarla hacia afuera del lugar donde estaba su nueva familia que esperaban para irse

No, no, Oshin- dijo ella aferrándose a la mano de el mientras lloraba mas y la mujer la giñaba para separarla de el chico a la cual la pequeña  se aferraba tanto - NO QUIERO- empezó a gritar y patalear en brazos de la mujer- QUIERO ESTAR CON EL- seguía mientras se removía en los brazos de la mujer con total desesperación mientras ambos se aferraba entre si para no soltarse- SUELTAME, DÉJAME, DÉJAME, SUELTAME- seguía ella gritando y pataleando 

Padre- gruño el chico aferrandoce igual a la  pequeña, el hombre al ver   resistencia en ambos tomó del brazo a su hijo y le giño luego del mismo para que soltara a Fumiko Y que asi pudieran llevársela al lugar donde estaría ahora - déjenla- gruño mas el con impotencia cuando sus manos se  soltaron por el giño del padre a el,  al ver a la mujer que se la llevaba hacia adentro del lugar mientras ella lloraba y gritaba

Es lo mejor- justifico su padre a su hijo de manera neutra reteniendolo del brazo para que no fuera detrás de ella, Oshin le dio una patada a su padre para que lo soltara y cuando obtuvo su cometido corrió hacia donde iba Fumiko, cuando llego a la entrada del lugar miro que metían a la fuerza en un auto azul a Fumiko quien gritaba y lloraba mas y mas fuerte cada ves que entendía que si lograban  meterla a el auto probablemente jamás pueda volver a ver a el chico ojos miel con el que estaba  en tranquilidad antes, Oshin  sintió   su  corazón ser detenido por la angustia y tristeza, sentimiento que fue reemplazado por la rabia que  lo inundo

DEJENLA, REGRESENMELA- gruñía Oshin corriendo hacia el auto, las personas  lograron a dentrar a Fumiko a el auto y este a penas cerraron la puerta arranco a toda velocidad alejándose de ahí mientras la niña golpeaba los cristales del auto gritando que la dejaran y se la  devolvieran

Oshin gruño y grito a todos lo presentes mientras golpeaba todo lo que le pasaba en frente se moviera o no, el padre llego a él y lo tomo de nuevo del brazo haciendo que Oshin nuevamente lo golpeara pero esta ves en sus partes nobles  y lo maldijera hasta mas no poder mientras lagrimas de enojo e impotencia se deslizaban por sus mejías rojas de la ira

TE ODIO- le grito Oshin al hombre que estaba de rodillas en el suelo frente a el sosteniendo sus partes íntimas, el mismo abrió los ojos de par en par al ver la cara roja de la ira de su hijo de doce años- LOS ODIO A TODOS, OJALA SE MUERAN- seguía el entrando al lugar de nuevo y destruía todo lo de este- MUERANSE MALDITOS IMBECILES DE M****A- seguía mientras estrellaba un jarrón contra la pared, el padre dejo que su hijo desahogarse de la ira que cargaba y le prometió a la mujeres del lugar que pagaría por todo lo destruido y con un extra por las molestias causadas

Luego de una hora de haber destruido todo lo que sus manos alcanzarán en el lugar, Oshin entro al auto azotando la puerta con total molestia, su padre solo suspiro pesado y subío a el auto luego de pagar una gran cantidad de dinero a las mujeres del lugar  y arranco hacia la manada para que su hijo siguiera su berrinche en ella asi no le saldría  tan caro como le salió en ese lugar

Apenas llegaron a la manada el joven enfurecido bajo del auto asotanado la puerta otra ves y subió directo a su cuarto mientras las lágrimas que había estado reteniendo en todo el camino se deslisaban por sus mejias mientras subía las escaleras  y prosiguió a destrozarlo todo al igual que  en el orfanato

Mientras que Fumiko, ella la llevaron a esa casa donde viviría ahora y apenas le mostraron la habitación que usaría se lanzo a la cama y se  puso a llorar como si no hubiera mañana con la promesa que se reencontrarían y no se separarían de nuevo pues su destino era estar juntos, eso era seguro ...

Ella no grito, tampoco golpeó a nadie, ni mucho menos  maldijo a muerte a  nadie. Simplemente lloro y lloro sola en el cuarto rosa lleno de cosas para que una niña de tres años pudiera estar bien, pero en su interior odiando a el señor Mael Itreque por permitir que los separaran y ser   la causa de haber soltado la  mano de Oshin, esa a la que se aferraba con tanta fuerza horas antes​