Janette salió corriendo del laboratorio y marcó apresuradamente el número del Dr. Hill, uno de los médicos más experimentados del hospital. Caminaba de un lado a otro por el pasillo mientras esperaba que la llamada se conectara.
—¿Dr. Hill? Soy Janette. Tengo una situación crítica en el laboratorio. Encontré cicutoxina en el sistema de Lucas, el que tuvo una reacción alérgica a la mantequilla de maní.
—¿Cicutoxina? ¡Eso es imposible! —exclamó el Dr. Hill—. ¿Estás segura?
—Por supuesto que estoy segura, Dr. Hill. Encontré la toxina en su muestra de sangre.
El Dr. Hill aspiró con fuerza. —Esto es grave. Necesitamos llevar a Lucas a la UCI de inmediato. La cicutoxina es mortal, y debemos eliminar cualquier resto del veneno en su sistema.
—Sí. Ya les dije que lo hicieran. Estoy en camino a la UCI ahora mismo —respondió Janette, con la voz tensa por la urgencia.
—Diles que preparen la vía intravenosa de inmediato y comiencen a administrarle adrenalina y atropina. Necesitamos estabilizarlo