“¿Cuánto tiempo planeas mantenerme aquí, Dafe? ¡Es inútil! El nombre de los Simon ya está arruinado, jajaja!” burlóse Angie, sin miedo, haciendo que los pensamientos de Dafe se descontrolaran.

Dafe estaba bajo presión de sus padres para salir a la luz y resolver los rumores que habían manchado la reputación de los Simon.

Pero todo lo que podía hacer era mantener a Angie encerrada —sin tomar ninguna medida concreta.

“Bueno, hagamos un trato. Borra todas esas fotos y yo me someteré a tu plan”, dijo Dafe.

“Borrar esas fotos es fácil. Pero ¿Pero ¿qué garantía tengo de que no romperás nuestro acuerdo? No te olvides, Dafe —la reputación de los Simon ahora está en tus manos”, burlóse Angie mientras se acercaba coquetamente, con su rostro a centímetros de el. Pero Dafe la miró con odio puro.

“Está bien. Mañana llamaremos a los medios y haremos un comunicado público en el que la mujer de la foto eres tú. Luego anunciaremos nuestro compromiso.”

Dafe pensó que era mejor confesar y casarse con An