El corazón se le bajo a los pies y se quedó mirando sorprendida a la persona que estaba tocándole el hombro. ¿Qué hacia él allí? Ella había pensado que él la había dejado plantada. Él le apretó el hombro con suavidad y le sonrió.
—¿Por qué estas llorando?—le preguntó Chris a ella.
Cassie no podía dejar de mirarlo con sorpresa. En verdad había pensado que él la había dejado plantada. Se lo hubiese merecido por haber actuado tan estúpida últimamente, pero él… él estaba allí frente a ella, él no la había dejado. Cassie empujó la silla y se lanzó hacia Chris, abrazándolo con fuerza, envolviendo su cintura con sus brazos, sintiéndolo. No era una ilusión, era real. Cuando pensó que él se alejaría de ella, Chris pasó los brazos por su espalda y la abrazó, pegándola más a él.
Él estaba allí con ella. La había esperado todo este tiempo. Comenzó a llorar otra vez, dándose cuenta de que era una mujer con suerte, cualquier hombre en el lugar de Chris se hubiese alejado luego de todos esos altibajo