Al volver a la casa manada vimos que todo estaba hermoso realmente mi princesa se había esmerado en preparar todo esto para la fiesta , las fiestas pasadas han sido diferentes para esta se esperan mejores momentos ya han crecido y pronto tendrán que dejar el nido como dice su madre , solo espera que el mate de su hija jamás la haga sufrir.

Faltaban solo un par de horas para que todo empezará, algunas manadas empezaban a llegar, el Padre de Eva había llegado para según el ver como estaba su nieta preferida, era igual de consentidor que mi madre, Christopher y su Luna también habían llegado junto a sus cachorros, prácticamente toda la familia estaba reunida, ya habíamos enlazado a algunos miembros de la manada para que estuvieran haciendo guardia ya que no queríamos que nada malo pasara en esta velada.

Empezaba a ocultarse el sol, la oscuridad empezaba a llegar, eran pasadas las seis de la tarde era tiempo que las manadas se reunieran en el centro donde estaba la pista de baile, para como cada año felicitar a mi madre y a mi princesa y así dar inicio a la gala.

Punto de vista de Jade

Era la fiesta anual, todos los años era la misma fiesta solo que este año algo se sentía diferente, eran mis veintiséis pero algo decía que esta noche todo iba a cambiar, Cleo mi loba se sentía ansiosa, caminaba de un lado al otro ella jamás se comportaba de tal manera por lo cual algo en mi decía que algo está noche iba a cambiar, el cielo empezaba a pintarse con las hermosas estrellas era noche de luna llena la verdad solo a mis ocho años vi una luna llena roja en mi cumpleaños como la de esta misma noche, casi siempre eran lunas normales pero esta vez era una luna llena roja el cielo se veía precioso las estrellas y nubes hacían un hermoso paisaje, la verdad todo se lograba ver hermoso , las mesas en el patio fuera de la casa manada, las pequeñas luces amarillas que iluminaban alrededor de todo el patio y de fondo la hermosa luna roja dejaba un paisaje que enamoraba, desde mi ventana lograba ver como poco a poco la gente empezaba a llegar por lo cual sabia que mi madre subiría a mi habitación para poder bajar.

Nunca había sentido nervios en mi vida pero como dije antes algo en mi estaba diciéndome que hoy todo iba a ser diferente.

Toc… Toc… 

—Mi pequeña es momento de bajar dijo mi madre detrás de la puerta para luego abrirla.

—Si ma, ya voy , despegándome de la ventana para chocar con mi madre con un vestido hermoso como los que ella sabe vestir, este era celeste con brillantes y detalles color plata, largo y escotado dejando ver sus atributos muy bien.

—Que hermosa estas, ya no eres más mi bebé has crecido tú padre esta muy orgulloso de ti por los preparativos de la fiesta, todo esta hermoso allá abajo.

—Sin Jean no hubiera logrado nada de eso él me apoyo mucho, merece méritos también, se que mamá nota mis nervios por lo cual saca conversación mientras bajamos .

Bajando las escaleras de la casa manada mi padre y mi hermano me esperaban en el primer peldaño.

-Luces hermosa, muchas felicidades hermana te amo mucho espero que cumplas muchos años más.

–Totalmente de acuerdo con tú hermano estas bellísima, ojos llorosos empezaban con la amenaza de llorar, pero papá es tan fuerte que supo aguantarse, luces bella y de igual forma espero que la diosa Luna te tenga con nosotros por muchos años mi princesa, me da un beso en la mejilla y un fuerte abrazo.

—Gracias a ambos, los amo y también están muy guapos espero que esta noche sea una gran velada y que ambos me dirijo a Jean le giño el ojo y una sonrisita medio picarona espero que esta noche  logremos encontrar a nuestros mates, muack…

 

Tomo el brazo de mi padre mientras mi hermano baja con mi madre.

–Estas lista dice mi padre con una sonrisa en su rostro aunque noto en sus ojos un poco de preocupación.

–¿Pasa algo papá? Te noto algo preocupado.

–Nada que no se puede solucionar, dice fingiendo una sonrisa.

–Vamos pa, ya no soy una niña que puedes engañar, conozco tu cara cuando algo pasa así que dime , puedes confiar en mi.

–Mi niña este no es momento, prometo contarte pero hoy no, es momento que disfrutes de lo que tanto te costó.

–Promételo que me dirás sea lo que sea.

–Si mi niña lo prometo ahora cambia esa cara y has tu entrada triunfal. 

Salimos de la cocina de flores que se había puesto en la entrada y todos empiezan a aplaudir, mi abuela ya estaba en una mesa con algunos invitados y mi abuelo, para ella siempre este es mi momento por lo cual nunca le ha gustado salir de mi brazo siempre dice que ella ya disfruto de sus cumpleaños que ahora es mi turno.

Mientras voy caminando a la mesa del banquete, voy observando a algunas caras familiares y otras no tanto veo gente nueva, en realidad a esta fiesta solo son invitados los Alphas con sus lunas e hijos mayores de dieciocho años y los jóvenes mayores de dieciocho años de la manada, más que todo para que en esta velada la diosa Luna nos bendiga y podamos encontrar pareja, por lo cual conozco a muchos hijos de Alphas, pero esta noche hay un grupo tanto de jóvenes como de Alphas que no logro reconocer, ah de ser alguna manada que papá o mis tíos agregaron a las listas.

–¿Qué pasa mi niña?

–Nada papá es solo que hay gente nueva en los alrededores, no pensé que habías agregado a gente nueva.

–¿Gente nueva? Ah si, si son manadas que han venido en busca de un nuevo hogar y nuevos comienzos, no hay de qué preocuparse, pero algo en su tono y sus gestos me dijo todo lo contrario, conocía a papá súper bien y por ende se cuando algo a da mal o algo malo esta pasando, se que me mintió con lo de las manadas que han venido q buscar nuevos comienzos pero ya mañana sacar toda la información.

Llegamos a la mesa del banquete y era momento de que papá como cada año hiciera algunos anuncios, el feliz cumpleaños y luego todo mundo haga lo que quiera, la fiesta como era hasta el amanecer, nadie se preocupaba por la hora.

Casi eran las diez de la noche ya me dolían un poco los pies el calzado no había sido el adecuado y es algo que aun en mis veintiséis años no he aprendido, no debo de usar calzado nuevo sin antes cerciorarme que no me van a dañar los pies, tome una silla y empecé a quitar mi calzado total nadie me verá los pies, mejor descalza antes que con ampollas.

Es raro ver a la cumpleaños quitándose el calzado, era una voz masculina que hizo que mi loba empezará a gritar como loca en mi cabeza, mate, mate, mate, yo quede algo aturdida era algo que le he rogado mucho a la diosa Luna que esperaba llegase hoy pero como no había tenido ninguna señal di por echo que aun no había llegado mi alma gemela, pero no él está acá grita Cleo en mi cabeza da la vuelta para verlo tenemos que saber quien es esa persona que la diosa luna puso en nuestro camino, tenemos que saber a quien le pertenecemos, pero antes de dar la vuelta el con su voz súper sexi vuelve a hacer un comentario el cual no preste atención alguna, pues aquí estaba parado frente a mi, un hombre alto media como un metro noventa y cinco, cabello color castaño, ojos azules, piel blanca súper fuerte se notaba que hacia mucho ejercicio o se entrenaba súper bien.