Un par de horas después, Sarah se encontraba lista para salir del hospital. Lucas mantuvo el control usando hasta el último ápice de su fuerza de voluntad y la ayudo a levantarse de la cama, tomándola por el brazo para acompañarla hacia la salida. Les había pedido a sus padres que estuvieran ahí en ese momento, afirmando que necesitaba ayuda, que se sentía nervioso. En cambio, la verdad es que eran otros sus planes.
—¿Podrían llevarse a la niña con ustedes mamá? —le cuestiono de forma sorpresiva.—¿De que hablas? —intento entender lo que pasaba.—En el bolso esta su fórmula, llévenla a la casa del abuelo por un par de horas. Pasare a buscarla más tarde —le pidió, consciente de que no había nadie mejor que ellos para cuidarla.—¿Que sucede Lucas? —intento entender Gabriel.&m