52. Reloj corriendo
52
Eve
Después de pasar el día con Kasius y entrenar me bañé y me puse un vestido rojo y unas botas de caña alta, ahora que la noche estaba cayendo decidí buscar a Orión para que me lleve a la ciudad. Quería alejarme de la mirada penetrante de Magnus.
Lo que no esperaba era encontrarme con Ethan Lupin.
—Eve —dijo con una sonrisa al verme— que alegría verte de nuevo por aquí.
Ethan, el Beta de una manada aliada.
Fuerte, atractivo, confiable. Perfecto para mi plan de distracción.
—Ethan —sonreí mientras me acercaba con naturalidad—. ¿Qué haces aquí?
—Negocios —respondió encogiéndose de hombros—. ¿Y tú?
—Disfrutando de mi libertad —dije con un tono juguetón, sintiendo el ardor de la mirada de Magnus a lo lejos.
Ethan arqueó una ceja, curioso.
—¿Libertad?
—Sí, es agradable no estar atada a nadie.
La mirada pesada de Magnus se acercó con calma, pero no interrumpió. No todavía.
Ethan sonrió y extendió su brazo.
—¿Te gustaría tomar algo conmigo, entonces?