Capítulo 11

—¡Tori! Vaya, estas...hermosísima —me observó, algo me decía que iba a caerme a golpes, en su mirada hubo duda —¿Qué? Di algo mujer.

—Apareciste. Después de tanto tiempo, vuelvo a verte la cara, Theo. Por lo visto fui como una especie de peste para ti, tanto que pensé que huías cuando te marchaste de manera apresurada del país —allí estaba mi chica, la que extrañaba como un loco. La chica altanera que no se callaba ante nadie lo que pensaba. Me crucé de brazos con una sonrisa ladeada, lo hice con la mayor intensión porque cuando fuimos novios no se cansaba de decirme cuanto le gustaba mi manera de sonreír. Sus ojos me taladraron serios.

—Vaya saludo, Tori. Lo tengo bien merecido. Y no eras ninguna peste, simplemente la universidad a la que iba a estudiar en Alemania había comenzadoun curso antes de clases y yo iba retrasado. Dime, ¿ acaso tenía despededirme de nuevo de ti? Quedamos como amigos después que me terminaras, aunque yo perdí todo contacto contigo. Fuiste tú la que dejo de
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App