Capítulo 21. ¡Eres muy valiosa para mí!
Jennifer:
Una vez que me vestí y me maquillé, justo antes de salir de la habitación, me coloqué la gargantilla, la cual hacía juego con el anillo de matrimonio. En todo caso, preferí no usar zarcillo alguno, los que uso siempre, no combinan con estas joyas.
Cuando bajé las escaleras, Brad estaba de pie a un lado del bar. Él, estaba muy guapo, parecía un auténtico galán de cine, se veía como más alto. Su tez blanca, estaba totalmente bronceada por el sol.
Sus ojos mostraban admiración al verme. Luego, caminó hacia mí, me tomó de la mano y me hizo dar una vuelta, desfilando el traje que me había comprado y las joyas.
—¡Estás hermosa, bella, preciosa como siempre! —Me alabó— Pero, falta algo —detalló él sonriendo, extrayendo de sus bolsillos un par de zarcillo de diamantes, que hacían juego con la gargantilla.
Él, mismo me colocó los zarcillos, logrando estremecer y enchinar mi piel. Al bajar Brad sus manos por mis brazos, percibió mi piel de gallina, lo cual le agradó. Evidenciándose e