Capítulo 14. Permiso provisional
Brad:
Cuando observé lo nerviosa que estaba, traté de calmar a Jennifer. Le expliqué que mis hermanos son personas sin muchas complicaciones, que confiara en mí. En todo caso, no voy a permitir que nadie, sea quien sea, le perjudique o la intimide a ella.
—Necesito que te conozcan, por eso hemos venido a la junta. Aquí, está la sede principal de la empresa —expliqué, para que esté al tanto, por si le preguntan mis hermanos.
—¿Qué quieres que les diga sobre mí? —Me preguntó ella— Presumo que no deben saber nada, sobre nuestro acuerdo matrimonial —agregó.
»Comprendo que por ayudarme, estás arriesgando mucho. Deduzco, que eres inmensamente rico, mientras yo, no tengo ni donde caerme muerta —afirmó ella, nerviosa.
—¡Ja, ja, ja! —Sonreí— Lo que piensen mis hermanos me tiene sin cuidado. Aunque imagino, que si se enteran, creerán que me volví loco —sonreí, mirando a esta con ternura.
«No entiendo ¿Por qué ella me inspira tanto deseo, como ternura? Esto, nunca me había pasado con las mujeres