La supervisora se quedó sorprendida de que alguien la reprendiera
— Solo estamos jugando, no pasa nada, ¿cierto, Aneli?
— Si pasa, no voy a seguir tolerando este mal trato, he dicho que renuncio, voy a denunciarla ante los jefes, esta injusticia no se va a quedar así — la jóven loba no se iba a quedar callada
— ¿Dime dónde están los jefes para denunciar este maltrato laboral — pidió el beta
— No es necesario, ella dijo que ya se va de la empresa, es solo una empleada más, es lo mejor, ella solo venía a coquetearle a los lobos
— ¡Eso no es verdad, ella miente, me está acusando de algo que no es cierto, es su novio quien siempre me acosa! está loba a acusado a otras chicas de lo mismo, pero es su novio el pervertido
— ¡Cállate, no difames a un hombre inocente!
— ¿Qué está pasando aquí, Rosalía? ¿por qué esos gritos?
— Su supervisora estaba maltratando físicamente a esta señorita, me acerqué para defenderla, no sabía que en este reino había tiendas que ejercían el malt