Conquistando a mi primer amor. Capítulo 32. Capítulo final.
Horas más tarde, Nataniel y Rayito tomaron el avión para darse un merecido descanso y disfrutar de su tan esperada luna de miel.
El destino elegido para su viaje era una hermosa isla en el Mediterráneo, conocida por sus playas de arena blanca y aguas cristalinas.
Cuando descendieron del avión el sol brillaba intensamente en el cielo azul, mientras el aire cálido les daba la bienvenida, un taxi los esperó y los llevó al ferry para trasladarse a la isla donde se quedarían esos días.
Los dos conectaron completamente con el lugar, aprovechando lo que esta increíble ubicación tenía para ofrecer; nadar en sus cristalinas aguas y relajarse en las playas de arena suave, explorar los pintorescos pueblos costeros y disfrutar de la deliciosa gastronomía local.
―¿Puedes creer que finalmente estemos aquí? ―dijo Rayito emocionada, mirando a Nataniel con una sonrisa radiante―. Es como un sueño hecho realidad.
Nataniel asintió, admirando la belleza del paisaje y la felicidad que irradiaba su esposa.