156. CHARLOTTE, LO LAMENTO
ALFRED
Tenía la esperanza de que Vivianne hiciera algo así, poder dominar a estos animales para que nos protegieran, curar a quien quisiéramos, no a todos, mantener esa decisión exclusivamente para las personas que lo pagara bien y nos trajera beneficios, ahora esta puta es quien tiene el control.
— Yo diría, que deshacerme de una escoria como tú, es hacer la mejor acción para la raza – me respondió con una sonrisa sarcástica de autosuficiencia.
Ver su rostro me recordaba tanto a Astrid y sus aires de superioridad.
— ¡Debí asesinarte cuando tuve el chance, estrangular a una arpía como tú desde la cuna! – me abalancé corriendo hacia ella.
No podía vencer a tantos Renegados, sería asesinado, pero si me la llevaba por delante, moriría feliz.
— ¡AAAhHHH! – Caí de rodillas a solo unos metros de la Sacerdotisa, grité de dolor al sentir como si llamas abrazadoras quemaran mi cuerpo entero.
Bajé las manos y me abrí la camisa a tirones para ver esa pudrición de venas negras contaminar casi tod