CAPITULO 12
MARICELA

Adicción, es lo que es Sebastián para mi, mi cuerpo exigía a gritos ser tocado por esas manos que producen tanto fuego en mi cuerpo al punto de hacerme perder la m*****a cordura.

No podía resistirme a tanto placer y más si viene de mi sensual jefe.

—¡Mierda!, mi casa está lejos. —golpea cabreado el volante. —¿Entonces porque no vamos a mi casa?.

¡¿Que cosa dije?!. ¡No!. Definitivamente a mi casa es el peor lugar al que podríamos ir, y ya se imaginan porque lo digo. Pero no, yo estúpidamente tengo que sugerirle mi casa.

—¿Estas segura que tendremos la privacidad ahí?. —su pregunta fue como un ronroneo para mi. —¿Estas segura Marcela?. — cruzo de brazos porque todavía le da vueltas al asunto —¿Quieres o no quieres?.

Al verlo sonreír por mi tono desesperado ¡Dios!, humedece mi coño por lo sensual que hace esa m*****a sonrisa.

Le di mi dirección y en menos de media hora estábamos frente a mi casa y lo primero que veo es al imbécil de Alan hacerle mimos a esa perra. ¡Ja!,
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App