Esperaba poder tomar el control de todo, cierto, pero además debía tomar en cuenta a Jelena, no me había querido acercar lo suficiente, porque me dolía la relación que tuvo con mi padre, no estaba muy dispuesta a compartir nada con ella, sin importar que hubiese dispuesto mi padre. La vi llegar destruida y cabizbaja, ya no era la misma chica altiva y suspicaz que conocí en aquella playa, a veces lucía sombría, triste. No pude pensar más que, Eitor tenía mala mano, o tal vez había algo más, estaba más delgada, demacrada, era más descuidada en su forma de vestir, menos coqueta, su personalidad tampoco era la misma, no hacía comentarios mordaces, antes parecía odiar a Eitor, de pronto parecía su mascota. Él era muy manipulador, nunca creí que ella cayera con sus encantos, era lo que quería, pero lo creí difícil.—¿Qué tanto piensas? —preguntó Valentín, me rodeo con sus brazos desde atrás.—En Jelena, nunca creí que cayera en las garras de Eitor, tan fácil. —Falta de cariño, se crio sin
Leer más