NARRA LINDSAY
Despierto de mi sueño sintiéndome con energía lo cual es raro, ya que siempre me levanto como si me hubiese perseguido el mismísimo diablo. Miró el reloj las 7:30 am. ¡Oh joder! yo despierta a esta hora un domingo, estaré soñando, ha de ser, me doy un pequeño pellizco.
Maldición...
Sí, sí estoy despierta.
Me levantó tranquilamente, lavo mis dientes y bajó a la cocina.
Mi madre se encuentra dandole de comer a Lissy, mi padre lee el periódico tomando una taza de café mientras Gael y Kale juegan con unos videojuegos.
-Buenos Días familia. -digo alegre dándole un beso a mamá.
Todos quedan en silencio mirándome fijamente.
¿Y ahora que les pico?
-¿quién eres y qué has hecho con mi hija?-dice mi padre.
Ruedo los ojos.
-buenos días cariño. -dice mi madre, tan linda. -¿te pasa algo, estás enferma? -pregunta tocando mi frente, retiro lo dicho.
-eres un tipo de alienígena o algo así-pregunta Kale. Lo miró con el ceño fruncido.
Y así es cómo se arruina una perfecta mañan