Apolo
No había una forma fácil de admitirlo, sin darle la razón a todos los que me lo advirtieron. Lo había estropeado todo de la peor manera posible, y la única manera de arreglarlo sería actuando por mi propia cuenta. Estaba con alguien por primera vez en casi cinco años y ni siquiera podía verla sin sentirme culpable. Realmente me gustaba, también fuera del dormitorio. Brianna se filtraba en mis pensamientos cuando menos lo esperaba, hacía mejores mis noches con su risa y sus intentos por cocinar, mantenía mi mente activa con sus conversaciones y sus cuestionarios infinitos: ¿Dónde estudiaste? ¿Cuántos libros leíste?...Me gustaría mucho leer una novela de amor, ¿podrías ayudarme? ¿Fuiste a muchos museos? ¿Has ido a la opera? ¿Y a ver el ballet? Me gustaría tanto ver una obra de teatro o ver el ballet…¿Cómo no caer rendido a los pies d