Enrique se apartó y volvió a empujar denuevo dejando que se
acostumbrara y cuando la penetró por tercera vez la sensación de incomodidad
había desaparecido. Constanza suspiro de placer, la dulce sensación del
inminente orgasmo naciendo en su pelvis denuevo
- Oh Enrique .....
El enterró la cara en su cuello, moviéndose con fuerza a
delante y hacia atrás, era maravilloso, se decian cosas al oído, haciéndole
saber al otro cuanto disfrutaban y cuando sintió que estaba a punto de caer al
precipicio de nuevo se lanzó de cabeza.
Si el primer orgasmo había sido un alivio, aquel fue una
explosión de sentimientos, no pudo evitar el grito ronco que escapó de su
garganta mientras el empujaba con fuerza, por última vez abrazándola hasta que
el ritmo de sus corazones volvió a ser normal
- Yo no sabía ...- Empezó a decir Constanza - No sabía que
perder el control pudiera dar una sensación de poder
- ¿Ah sí?
- No sabía que pudiera ser así
- ¿Ha sido tu primer orgasmo? .- Le pregunto Enrique
sorprendi