Capítulo 42. Poco cuidado
Paola después de escuchar a su amiga desahogarse la sacó del restaurante, ella no estaba nada bien.
Joseph se sorprendió cuando Paola le pidió llevarla a casa, pero no hizo comentario hasta dejarla en la puerta de su pequeña casa.
De regreso Paola estaba pensativa.
— ¿Qué le pasa a Tamara? —Preguntó Joseph y Paola suspiró.
—No sé qué aconsejarle. Está embarazada, me pidió acompañarla a la clínica para deshacerse del bebé, porque ha ido dos veces y no ha sido capaz.
—No es algo planeado entonces —inquirió Joseph—, ella es muy joven y francamente tiene una vida por delante que se verá limitada si es madre ahora.
—Yo estuve en su posición; Emily es mi ángel, aunque su padre es una bestia. Yo lo pensé y no me atreví, por eso no sé qué decirle a Tamara que tiene tantos problemas.
— ¿El padre sabe?
—No, ellos no tuvieron una relación seria, fueron poco más que sexo casual.
— ¿Justin?
Paola afirmó con la cabeza.
—Obviamente no es algo planeado.
Joseph se quedó callado pensando en los planes