Le regalé a mi querido esposo un fin de semana de lo más normal, tranquilo y aburrido como solían ser. Yo jugando el jardín con mi hijo, cosa que disfruto al máximo. Después, encerrados en la biblioteca, revisando sus lecciones, que en realidad solo revisamos unas pocas y después lo dejo jugar un poco en su consola.

Liam es un niño y necesita un poco de diversión. Ya que su padre siempre nos tiene encerrados, por lo menos quiero darle ese gusto. Liam, siempre ha soñado con que vayamos al parque de diversiones, pero Carlo, siempre se ha negado a llevarnos y también a que vayamos solos. Dice que eso es de gente sin clase.

Lo primero que haré cuando solo seamos nosotros dos es ir al parque con mi niño. Lo subiré a todos los juegos que pida y le compraré muchas golosinas. Por ahora solo le puedo dar esa pequeña diversión a medias porque siente que quitar absolutamente el sonido para que su padre no escuche. Es algo frustrante porque Liam, dice que le gusta escuchar el ruido de ellos, los