Lucas
¿Por qué?
Cómo puede preguntarme eso, después de besarla, paso una mano por mi cabeza, camino rápidamente hasta la puerta del local e intento que el aire fuera de la pastelería calme mis propios sentimientos. La mujer que atormenta mis pensamientos se mueven hasta donde estoy, me da una pequeña sonrisa nerviosa y me entrega mi chaqueta.
—Quieres ir a comer verdad — afirma nerviosa — vayamos a un lugar bonito que conozco.
No digo nada, tomo el chaleco antes de seguirla hasta el auto de mi hermana, Beatriz sube tranquilamente hasta el asiento del copiloto y mis ojos se encuentran con los de ella una vez más. Mi falsa novia los aparta casi al instante, puedo ver ese ligero sonrojo en sus mejillas y me maldigo internamente porque la deseo.
Salimos hacia la avenida principal en completo silencio, Beatriz conduce por casi toda la ciudad hasta la zona sur y llegamos a un barrio bastante concurrido, estaciona el auto a un lado de la carretera antes de abrir su puesta. Me saco la corb