Príncipe Kyle;
Anoche fue intensa, lo cual explica perfectamente por qué no pude pegar ojo y por qué mi corazón seguía latiendo aceleradamente durante toda la noche.
Si bien el vínculo de pareja siguió siendo un problema constante, mi principal preocupación en ese momento era cómo mis acciones y palabras habían afectado a mi familia. Aunque anoche me sentí abrumado por mis emociones, me tomé el tiempo para reflexionar y me di cuenta de que había reaccionado exageradamente y actuado impulsivamente.
El Kyle que le gritó a su madre anoche no era yo.
El Kyle que hizo llorar a su hermanita tampoco era yo, y el hermano mayor malvado que siguió acosando a su hermano menor no era yo. Ni siquiera Katie. Dios mío, también lastimé a Katie. Mi hermana gemela estuvo a punto de llorar anoche, y no era una llorona.
La culpa y el arrepentimiento inundaron mi mente, cuerpo y alma mientras yacía en mi cama, con la intención de quedarme allí hasta que se hubieran hecho todos los arreglos para que abando