La mejor noche de mi existencia a sido está.
Sin excepciones.
Qué mejor que despertarte en medio de tus dos hombres, pues sí nada mejor.
Mejoró aún más cuando hasta te traen el desayuno a la cama, sentir y ver ese lado de ellos hacia mí era lo mejor del mundo, más después de todo lo que les dije.
Aún ninguno hemos hablado de eso, y por ahora es mejor. Estar con ellos fue lo mejor del mundo, para que negarlo son maravillosos en todo sentido.