Cap. 41 A salvo
Lauren escuchó a dos enfermeras comentar:
—Se han robado a uno de los bebes del cunero.
Las vio correr hacia un sitio, su corazón comenzó a latir de nuevo, veía a los doctores ir de un lado a otro:
—¡Mierda qué pasa!
Una enfermera pasó diciendo:
—Hay disparos en el estacionamiento.
Vio a los guardias de seguridad acercarse:
—Nadie puede salir del hospital.
—¿Qué sucede?
—Estamos en emergencia.
—¿De cuál bebe hablan? Acabo de ser padre.
—Vaya a su lugar.
Entonces no vio a Rossi, no quería pensar mal, pero sentía que algo malo pasaba con su hija. Se acercó a información, pero la mujer estaba recibiendo llamadas de todos lados.
—Estamos en eso, controlamos la emergencia.
“Sofía” corrió hacia las escaleras de emergencia, bajó a toda velocidad, mientras escuchaba la policía acercarse y balas, ¡estaban disparando!, escuchó el tropel de doctores y enfermeras usando los pasillos de emergencia, un doctor lo detuvo:
—No puede estar usted aquí.
—Mi hija, le pasó algo malo debo de