A pesar de despreciar a la empresa Cesarina Entretenimiento, Yadira decidió consultar su página web.
El accionista principal era Carlos, sin relación alguna con Marina.
Aliviada, le envió un mensaje a Camilo.
Yadira: [Esta noche cocino yo, ¿volverás a casa?]
Camilo, en medio de una reunión, miró su celular al vibrar y respondió rápidamente: [Sí.]
La verdad era que Yadira no era una buena cocinera.
Cuando salía con Camilo, él siempre elogiaba su comida, aunque la verdad, sus halagos no eran del todo merecidos.
A las seis de la tarde, Camilo salió del edificio del Grupo Jurado.
—Presidente, ¿cenamos comida italiana esta noche? —preguntó Quiles al abrir atento la puerta del auto.
Camilo se inclinó y se subió al vehículo.
—Regresamos a Jardín Cielorén.
Una vez adentro, revisó su correo en el celular.
Abrió ansioso los mensajes y fotos enviados por la persona que seguía a Marina.
Las imágenes mostraban a Marina comprando verduras y llevando comida al hospital para Diego.
Cada vez que las mi