Clack~

La puerta se cerró suavemente tras Alphonse. Él se quedó inmóvil al cruzar el umbral. Su respiración se volvió densa, irregular.

La amplia mesa de madera oscura reflejaba el resplandor anaranjado del atardecer que entraba por los ventanales.

El ambiente estaba sumido en un silencio que solo lo puso más inquieto… Principalmente por la escena que tenía enfrente.

Frente a él, había varios hombres sentados. Algunos vestían trajes grises, otros negros, todos con semblantes severos. Entre ellos, Alphonse reconoció de inmediato al que había contratado para filtrar el proyecto Ainsworth en Brighton.

¡Sus manos se cerraron en puños! ¡El corazón le golpeó el pecho con fuerza!

"¡¿Qué demonios hace este maldito aquí?!"

Pensó ese hombre castaño. Sus dedos temblaron levemente. Respiró hondo, soltó el aire y caminó hacia la mesa con paso lento.

Donovan permanecía de pie, junto a los ventanales, mirando hacia la ciudad. Su silueta alta, firme y elegante bañada por la luz del atarde