―No. ―dijo, negando lentamente ―Sabes que no sucederá. Ahora… ahora Bianca está contigo, tu padre…
―No la amo. Y planeo hacérselo saber a papa. Te amo a ti, Amara y estoy dispuesto a luchar por esto. ¿Tú lo estás?
Ella lo miro en silencio. Quería decirle con todo su corazón que sí, que aún lo amab