De pronto, todo mi cuerpo se cambia a modo alerta. No sé qué ha pasado exactamente, pero, por la reacción de Nate, parece ser algo grave.
- Nate, acaba de decirme qué está pasando
Los nervios cada vez se apoderan más de mí. Quiero avanzar a la misma velocidad que lo está haciendo él, pero mis piernas se han empecinado con temblar y no me es posible.
Seguimos caminando y todavía él no me ha dado una respuesta.
No sé qué está pasando. Es como si ni siquiera me escuchara cuando le hablo. Está como bloqueado.
- ¡Nate! –le digo soltándome de su agarra y frenando el paso- ¡O me dices qué está pasando o me quedo aquí parada!
- Nicki, no lo sé, no me quedó muy claro, Leonardo estaba tratando de hablar conmigo pero casi no le pude entender nada por el llanto, estaba llorando como nunca y muy nervioso, creo… -hace una pausa y noto como traga en seco- creo que Alma está perdida
- ¿Perdida? ¿Cómo que perdida? ¿En la nieve a estas horas? ¿No se supone que estaba con tu hermano menor?
- No lo