Mariel llevaba ya un buen rato sola y sin saber que hacer, la actitud de esos dos la había dejado un poco alterada, en especial la de Daniel, que ha decir verdad fue algo más que un susto lo que le saco. Nada mas entrar, produjo algo en su interior, todo su cuerpo cosquilleo y se puso alerta, ella se lo había atribuido al susto inicial, pero debía admitir que la presencia del hombre le resultada abrumadora.

Era un tipo bastante guapo, alto, tez blanca, cabello castaño y quebrado, un poco largo haciendo que cayeran unos pequeños caireles en su frente y levaba playera de manga larga negra, acentuando mas sus facciones, se veía realmente atractivo. Seguía recordando al hombre cuando la puerta se abrió y ambos hombres ingresaron a la oficina

Daniel

Después de calmarnos un poco por el reciente descubrimiento, volvimos con Mariel, trataba de calmarme pero comenzaba a ponerme ansioso. Ella tenía unos lindos ojos negros al igual que su cabello que llevaba recogido en una bolita que sujetaba un pequeño moño blanco, llevaba sueltos unos mechones de cabello que caían por su linda cara apiñonada, acompañados de unos lentes pequeños y ovalados, haciendo verla mas tierna. Me había explicado lo que encontró al revisar el sistema de las computadoras y la verdad de toda esa información, lo único que recuerdo es lo linda que se veía al estar tan concentrada y yo como idiota que me encontraba por ese aroma que envolvía la sala, solo lograba asentir con la cabeza cada vez que ella preguntaba algo.

En un momento nos paramos para ir a la sala del servidor, quería revisar la instalación y poder terminar de conectar los equipos de las áreas restantes. Al levantarnos y comenzar a caminar hacia el elevador fue peor, su cara era muy tierna, pero su cuerpo era otra cosa, sus caderas eran grandes, anchas igual que sus piernas y su trasero...tuve que voltear y alentar un poco el paso para no pegar todo ese lindo cuerpo a mí, ese pantalón tipo cargo que llevaba no ayudaba en nada. Tuve que disculparme y regrese a la oficina, no podía seguir caminando con ella cerca, no sabía cuánto más aguataría para no reclamarla y cada que lo pensaba más, mas crecía mi enojo, yo solo había tenido en la mente a una persona desde que la conocí y cuándo la diosa nos emparejo, no pude ser más feliz de tener a Dian como mi mate y ahora estaba aquí, recostado en el sofá de la oficina, con la cabeza hecha un maldito desastre y Noha molestando recordando lo buena que se veía la mujer.

-haaaaaaaa no por queee, ¿por que otra vez?

-¿Daniel? -Llamó Omar entrando a la oficina

-Dime

-Amigo cálmate quieres, por lo que veo no pudiste aguantar la presencia de nuestra luna –dijo con burla el muy maldito.

-No le veo la gracia por ningún lado Omar, ¿no ves todos los problemas que esto conlleva?

-Lo sé, sabes bien que eso es solo un mito, solo a un alfa le paso algo así, no sabemos si realmente signifique guerra inminente. No lo pienses tanto, mira su aparición como un nuevo comienzo para ti, para nuestra manada.

-La manada es lo que más me preocupa, - me senté y mire a Omar de frete -sabes bien que los humanos no son comunes entre nosotros, los pocos que hay están en Ixmil, ese pueblo fue especialmente construido para la convivencia de los nuestros con los humanos, nunca en 1000 años que llevan formadas las manadas en el país, hubo una mate humana, el linaje puro se ha mantenido, no sé cómo lo tomen, - soltó lo último con un gran bufido

-Daniel, ¿estas considerando rechazarla?- pregunto con sorpresa el moreno

-Ni se te ocurra, no pienso dejar que hagas semejante estupidez. –Noha de inmediato salto a la defensiva

-Mmmmfff  Noha esta insoportable, aunque quisiera considerar la opción, dudo mucho que logre hacerlo con éxito, -conteste ya fastidiado

-Ok- Omar tenía cara de ¿alivio? Aggg hasta él mostraba más felicidad que yo, - es que de verdad no puedo aceptar las cosas así porque si, Dian fue mi mate, mi gran amor desde que la conozco y desde mucho antes de mi transformación sabía que había algo con ella, que tenía que estar conmigo, ¿cómo puedo tomar a otra mujer nada más así?

-Entonces... ¿qué es lo que harás?

-Para empezar buscar la forma de llevarla a casa, y de paso desquitar mi coraje con Iram

-¿Iram? ¿Y el por qué?

-En su reporte decía que estaba soltera y apestaba a otro humano, eso no me gusta nada, si se supone que es soltera ¿qué carajo hace con ese aroma?

-Vamos Daniel, sabes bien que los humanos no viven como nosotros, ellos son, bueno – puso cara de duda- más liberales

-que liberales ni que la jodida, no la quiero cerca de nadie más y punto –de inmediato noto su cambio de postura con ella. – además, tampoco sabemos si ella quiera, tal vez yo no la rechace, pero ella a mi... todavía hay esa posibilidad –dijo sintiendo una leve punzada en el pecho

-No otra vez no, estos malditos cambios de humor me van a provocar migraña – dijo esto mientras se tocaba la cabeza con ambas manos

-Ya perdí la cuenta de cuantas veces he dicho esta palabra pero cálmate Daniel, mira por hoy lo mejor será que la dejemos trabajar tranquila, por la tarde la llevamos a comer algo y sirve de paso vemos como va el trabajo.

-Bien... fue interrumpido de nuevo por Noha

-Comértela a ella es lo que deberías, avísame si no quieres, por que yo no pienso quedarme con las ganas

-¡ CALLATE NOHA !

La cara de Daniel está comenzando a tomar color y Omar conociendo al lobo de éste, sabía que tenía algo que ver en su repentino cambio de expresión

-jajajaja no sé que te habrá dicho Noha, pero tu cara... jajajaja – reía como loco agarrándose el estómago

A lo que Daniel respondió mas que enojado, bastante avergonzado – ya lárgate si no quieres que me desquite contigo, ve con ella y me informas para ir a comer.

-Ok ok me voy – salió quitándose lágrimas de la risa, mientras que él se quedaba discutiendo con Noha y sus impertinentes comentarios

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Decidieron comer en la cafetería del edificio, era más discreto, no quería que todo el pueblo se enterara que había una humana ahí, las únicas personas que sabían eran un par de secretarias y encargado de área, y se les habían dado explícitas órdenes de mantener cerrado el pico

Durante la comida, Omar había tomado más confianza con Mariel haciéndola reír de vez en cuando con alguna de sus ocurrencias, disfrutaba de su risa y lo relajada que se veía al hablar, pero tenía ganas de ahorcar al moreno, hasta parecía que lo estaba haciendo al propósito y lo peor era que las ganas de acercarse más a ella no se iban. De repente la conversación se tornó un poco incómoda

-Entonces lu –he no Mariel perdón – se claro la garganta rápidamente Omar, - ¿cuánto tiempo más que te llevará terminar?

-Pues no estoy segura, la instalación y configuración de los equipos restantes está casi lista, lo que me llevará más tiempo es instalar los programas que requiere cada departamento y los antivirus, con lo que paso, lo mejor será crear claves cifradas y poner candado a los equipos, espero terminar por mucho, mañana en la tarde

-¿Mañana? -Al fin había logrado hablar Daniel.

-Sí, sé que no es lo más conveniente, pero faltan algunos materiales, ya los solicite pero lamentablemente hasta el día de mañana los tendré. Mañana puedo llegar temprano de nuevo para que...

-¡NO! –el grito de Daniel hizo que la morena pegara un brinco, quiero decir, no es necesario que se vaya, el camino es muy largo y de verdad me urge que este todo listo –había improvisado esto último – por los materiales no te preocupes, mandaré a mi personal por ellos, dame la dirección y así evitamos contratiempos

Ambas caras al frente suyo mostraban confusión, especialmente Mariel, había notado los raros cambios de humor de ese hombre y la tenía algo descolocada. No estaba muy segura de que fuera lo mejor, había dejado a Tiago a cargo de su amiga y sería un abuso de su parte, pero por lo visto no había más que hacer

-Eee bueno si claro, solo por favor permítame hacer una llamada y confirmar, mi celular murió y deje algunos pendientes en casa

¿Pendientes? Si claro, nótese el sarcasmo, ¿Qué pendientes dejo? ¿Avisar a su novio donde estaba? – Daniel no estaba nada contento pero no podía hacer más de lo que ya hizo, aunque claro, todavía quedaba una cosa

-Si no hay problema, -cambio de nuevo su gesto por uno que dejaba ver su disgusto y malicia al mismo tiempo –lo mejor será que avises en casa donde estarás, cuando termines te llevare a mi casa y desde ahí puedes marcar. Nada más acabo la frase, la chica de inmediato negó

-N no se preocupe, no es necesario, puedo quedarme en algún hotel cercano y...

-No hay hoteles en este pueblo, contradijo rápidamente Daniel de mala gana

-Ee bueno yo... no quisiera causar molestias

-No es ninguna no te preocupes, tal vez no se note mucho, pero mi personal es prioridad, no te expondría de ninguna manera, no te preocupes por nada, a las 6 saldremos de aquí y mañana por la mañana te traeré de nuevo

-¿Personal? ¿Es enserio? Tamaño imbécil, como te atreves a llamar así a nuestra luna

-Cállate Noha, -dijo arrastrando las palabras – solo lo dije para poder vigilarla

-Más te vale, no te pases de listo niño bonito

-Si esta bien, muchas gracias. – contesto Mariel asintiendo levemente la cabeza con un poco de pena

Omar solo los veía y escuchaba con una sonrisa ladina, él sabía muy bien las intenciones de su alfa y le causaba gracia como buscaba tener cerca a la chica.

-bueno entonces, si me permiten, seguiré avanzando

-Claro Mariel pasa –asintió Omar

-Provecho, permiso –dijo la chica levantándose y tomando camino al elevador

- Así queee ¿Tu personal es prioridad? – dijo Omar al momento es que soltaba un sonoro zape a su amigo

-Oye ¿Qué te pasa idiota?

-¿Qué me pasa? ¿Qué me pasa? - Ho nada nada, solo que acabas de llamar "personal" –dijo con molestia – a nuestra ¡LUNA!

-aaaaaahh tú también, mira ya tengo suficiente con Noha ¿si?, sé que no estuvo bien, pero no se me ocurrió otra cosa

-Mas vale que vayas pensando que harás, tenerla en casa será malo para ti si sigues con esa desidia, y lo peor es que cada que abres la boca solo logras espantarla, céntrate ya Daniel, acepta las cosas y busca la forma de acercarte a nuestra luna, no podemos perderla.

Daniel solo bajo la cabeza pensativo, sabía bien que su beta tenía razón y necesitaba aclarar su cabeza ya, no quería dejarla ir al mismo tiempo que deseaba no sentir esto que llevaba todo el día en el corazón y pensaba en todo lo que implicaba el que ella fuera su mate, las cosas no pintaban buen panorama, pero sea para bien o para mal, tenía que tomar una decisión ya.