Narrado por Luke Brown
2 meses después
Mi hija tenía que ser la niña más bella y brillante de todo el mundo, es que no había otra explicación para mí. Algunos dirán que estoy cegado porque es mi hija, pero cuando una bebé es tan hermosa como ella, no hay por donde negarlo. Tiene la cara de su madre, y los ojos de su padre. Es una combinación perfecta de mi abejita y yo.
En otras palabras, es perfecta.
Pero, también hay que confesar que esto de ser padre no es muy fácil que digamos. Llegué a creer que con la ayuda de la niñera y con Amanda todavía en reposo, esto sería un paseo. No lo ha sido, porque un bebé es exigente las 24 horas del día.
Aun así, reconozco que si ser papá es difícil, ser madre es el triple de difícil, por lo que, a dos meses del parto de Amanda, se me ha ocurrido darle un regalo. Un día de spa lejos de las ocupaciones de ser madre, para esta escapada la acompañarán Leonora y Luisella.
De nuevo, Amanda me comprueba que ser madre es más difícil que ser padre, porque