—¿De verdad? — pregunta mordiéndose el labio. Okay... podía verse más sexy. Increible.
—Se escucha bastante salvaje...
—Soy bastante salvaje— añadió. Parecía complacido y se inclinó para verme mejor, pasó sus dedos por todo mi cuerpo, ahora bajando por mi ombligo, acariciando mi vientre. —¿Y qué má