Eva North
El bosque se encontraba en silencio. Como si el supiera que necesitaba el mayor silencio posible para poder atravesar el bosque sin ser descubierta.
Para poder llegar a la manada sin tener que causar bajas, sin tener que usar mis habilidades.
Pero mientras más me acercaba a mi antigua manada, a esa que vio todas mis bajas, me di cuenta de que la seguridad era a penas mínima y eso solo podía significar dos cosas.
O estaban demasiado seguros de que nadie se infiltraría en la manada, o no tenían suficientes guerreros a los cuales enviar a patrullar.
Pero mientras amas me acercaba, me iba dando cuenta de que realmente no estaban pendientes de quien entraba y salía de la manada por la sencilla razón de que estaban todos juntos en la casa del alfa.
Podía escuchar sus risas, sus gritos de celebración y por el olor que llegaba a mi nariz podía deducir que estaban consumiendo algún hongo alucinógeno que los estaba haciendo olvidarse de sus responsabilidades y me cuestioné qué tan