Sabía que estaba despierta, pero dudaba al pasar de los segundos mi estado. Todavía tenía a Roberta al otro lado del celular. También a la señora Celia observándome desconcertada ante mi reacción.
—¿Sigues ahí Lucy? ¿Dónde estás en este momento? — pregunta mi amiga.
Tomo valor para continuar hablando.
—¿Dónde estás tú más bien Roberta? ¿Estás de guardia?
—No, estoy libre. ¿Puedes acercarte a mi departamento o quieres que vaya a tu-
—Iré al hospital a averiguar qué está ocurriendo — le corto a pesar de que la puedo escuchar desalentándome a ello.
Después me dirijo a la salida de esta casa, porque no tenía tiempo que perder. Ni un minuto más lo haría. Llamo la atención de Selena y de Clara con mi paso acelerado.
—¿Nos vamos ya a nuestra cita importantísima con tu pedicurista? Es que no la podemos hacer esperar — Selena está acercándose a mí, como si fuese a acompañarme.
—Lo siento, pero hay un cambio de planes. Puedes reprogramar para después o ir sola, tú decides — le informo.
El rostr