ROMPIENDO EL COMPROMISO.
Narra Elizabeth.
Estaba sentada en mi escritorio firmando varios documentos y analizando un proyecto para una fundación que quiero crear para chicas con traumas psicológicos para ayudarles a superarlos gratuitamente, también quiero ayudar a mujeres que son maltratadas por sus esposos y no tienen el apoyo de nadie para poder salir adelante sin tener que aguantar maltrato.
Hay mujeres que por no tener una mano amiga quien la ayude a salir de bajo del yugo de su Verdugo siguen aguantando golpes, por qué no tiene un techo para vivir o como sustentarse y se quedan aguantando hasta que las matan y con mi fundación evitaré que miles de mujeres sean víctimas de maltrato.
Sonó mi móvil y a la vez la línea directa de la empresa, pero no sé por qué sentí más emoción al responder la llamada entrante en mi móvil.
—Por qué me llamas tanto — le dije a Gregory jugando con el lapicero que tengo entre los dedos.
—Me gustas tanto que no puedo dejar de pensar en ti — al escucharlo pongo los ojos