—Has estado muy pensativa últimamente Cokkie —miré a mi padre.
—Claro que no. Estoy como siempre —dije acomodando mis gafas.
— ¿En serio? Porque hay un error en estas cifras.
—Es imposible —volví a revisar el documento y había cometido un error básico en la cuenta. —Es cierto lo hice, discúlpame padre.
—Jamás te equivocas cuando tiene que ver con números y es raro cuando lo haces Cornelia, ¿Que pasa contigo pequeña? —suspiré.
—Padre dime algo… &ique