Punto de vista de Bill

El brazo de Calvin me apretaba la garganta como una tenaza, cortándome la respiración. Arañé su antebrazo, intentando liberarme, pero su agarre era fuerte, alimentado por meses de resentimiento contenido. Mi visión comenzó a nublarse por los bordes, con manchas oscuras flotando ante mis ojos mientras luchaba por respirar.

Me retorcí, lanzando mi peso hacia un lado, tratando de aflojar su agarre. Mis pulmones clamaban por aire y mi corazón golpeaba con fuerza en mi pecho. Necesitaba salir de esa situación, ya.

Con un último estallido de fuerza, clavé mi codo en sus costillas. Él gruñó, su agarre flaqueó lo suficiente para que pudiera zafarme y tambalearme hacia atrás, jadeando por aire.

Di un paso atrás, intentando recuperar el equilibrio, con la garganta ardiendo con cada bocanada de aire. Los ojos de Calvin estaban descontrolados, su rostro retorcido por la furia. Eso ya no era solo una pelea, era personal.

Pude ver que Calvin estaba tan agotado como yo. Su cami