Cómo siempre, Maskyn Villarreal mueve sus fichas, para ayudar a la cuñada de su hija, Selene. Afortunadamente la relación de Massimo y Maskyn ha mejorado al pasar los días.

Alfred quiere ir a ver a su jefe, pero su misión es velar por Aurora, la cual se fue de la mansión Spencer en busca de su hombre.

Sin embargo, la familia de Oliver también va camino al refugio. Daniela con todo el dolor de su alma tuvo que dejar a su esposo bajo el cuidado de Martin que siempre ha estado para Emiliano Spencer. La pobre mujer está dividida en dos, su hijo y esposo están al borde de la muerte.

Lo que es más sorprendente para Máximo, es que Aurora cumpliera con lo dicho y no llega sola, llega con su familia y muchos escoltas armados hasta la coronilla. Si no fuera porque ella iba en el primer auto, los sicarios de Máximo hubieran disparado y se hubiera formado una guerra siniestra.

Máximo se acerca a Aurora, la cual está con su frente en el alto dispuesta a defenderse si él impide ver a su mafioso.

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