Capitulo 28. Parte II.
Tuvimos que parar nuestro ligero ''coqueteo'' porque los invitados comenzaron a acercarse para saludar a Salvatore, incluso los recién casados se aproximaron a nosotros y expresaron sentirse sorprendidos y agradecidos por el hecho de que el italiano haya asistido, al parecer no le gusta estar en ese tipo de eventos.
'´Pobres, si supieran que estamos aquí solo por trabajo´´-Pensé.
En fin... me presento a unas cuantas personas, y siendo sincera no me sentí extraña con que dijera que soy su asistente, lo que si me hacia sentir incomoda era que todos se quedaban observándome sin ningún disimulo.
-¿Tengo algo en la cara?-Inquirí aterrada, y el hombre rio entre dientes.
-No es eso... detállalos, dibujas curiosidad en sus miradas porque es la primera vez que te ven.
-Oh-Asiento y resoplo-Que alivio.
Su sonrisa se volvió mas amplia con mi reacción.
Un mesonero paso por nuestro lado con una bandeja repleta de copas y nos entrego una a Salvatore y otra a mi.
-Salud-Dice el italiano, chocando de