CAPÍTULO 131. El motivo más antiguo del mundo
CAPÍTULO 131. El motivo más antiguo del mundo
Scott perdió la expresión rabiosa en un segundo y su rostro se volvió taciturno y pensativo por un segundo. Lucy casi podía ver los engranajes de su cerebro trabajando.
—Scott, Alejandra es mi amiga, yo la adoro, pero por eso mismo la conozco bien y sé que pasarás momentos muy amargos cuando se recupere y pueda valerse por sí misma —dijo, sintiendo que por fin él estaba escuchando—. Yo solo quiero lo mejor para los dos, pero a veces lo mejor para dos personas es no estar juntos. Ustedes merecen ser felices, pero hay demasiado resentimiento en su relación, demasiados conflictos, ¡pasaron años! No puedes pretender que las cosas sean como cuando se conocieron.
—Eso no importa, Alejandra quiere estar conmigo —replicó Scott con testarudez.
—Alejandra simplemente no puede soltar —murmuró Lucy con un suspiro molesto mientras apoyaba el trasero en una de las mesas—. Ella está acostumbrada a tenerlo todo y tiene que conseguirlo todo. No es mala, pe