—Entonces un corte rojo... —anotaba Anja en su libreta—. Jugoso... muy jugoso... ok, entiendo, muy poco cocinado... sí señor... sí... —caminó a la cocina a dejar la orden y Sonia la encontró de regreso.
—El tipo ese dice que vayas a atenderlo tú —rezongó y Anja miró en su dirección.
"El tipo ese",