CAPÍTULO TRECE
Antes de acomodarse decidió llamar a sus amigos para informales que había llegado ya. Realizó una video llamada que los conectara a los cinco. En unos segundos podía verlos a los cuatro, sonrió feliz.

—Holas chicos.

—¡Karen! —chilló Anna—pensamos que te habías olvidado de nosotros.

—¿Tan pronto?

—¿Qué tal tu viaje? —preguntó Xavier, parecía estar cocinando.

—Muy bien, gracias. ¿Qué haces?

—¿Yo? Haciendo arte en la cocina.

—¿Qué tal está todo por allí, cariño? —preguntó Ivonne.

—Bueno, me han recibido extrañamente bien. Por ahora no he visto al padre de Christian, me han dicho que en cualquier momento llegará.

—¿Y el dormilón cómo está? —preguntó Víctor.

—Está…—soltó un suspiro—bien, está muy bien.

—Ahm, ¿te refieres a físicamente o médicamente hablando? —preguntó Víctor que se había dado cuenta, aunque en realidad no había sido el único.

—¿Cuál es la diferencia? Soy fisioterapeuta—se puso a la defensiva.

—El hecho de que estés tan tranquila debe significar que él no sabe n
Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo