Estrella apretó firmemente los labios.

Después de un largo rato, finalmente dijo:

—Entonces, esta es la razón por la que nunca se ha atrevido a rebelarse contra Joaquín, por la que él la tiene controlada.

—Así es.

Carolina lo admitió sin dudar.

—Pero mamá, ¿si un día Joaquín quisiera divorciarse de usted?

Los ojos de Carolina se oscurecieron, no dijo nada.

Pero Estrella se dio cuenta de algo, de repente mostró una sonrisa burlona en su rostro:

—¿Cómo se va a divorciar de usted? Mamá, usted ya lo tenía todo pensado.

Levantó la mirada hacia Carolina y habló lentamente:

—Aunque Lucas es arrogante, sí se preocupa por usted, y usted también me está usando a mí, ¿verdad? Mientras yo me case con los Quiroz, teniendo a esta hija, cuando Joaquín quiera la ayuda de los Quiroz, la va a usar a usted para presionarme, él necesita su ayuda, así que no se va a divorciar de usted, ¿cierto?

Sus hermosos ojos parecían ver a través de todo.

Carolina bajó la cabeza, las emociones en sus ojos eran confusas