Belinda
Aún no puedo creer que Fernando está frente a mí. Siento que la rabia me invade al verlo, quisiera gritarle o golpearlo pero debo controlarme.
-¿Tú que haces aquí? -Le lanzo una mirada asesina
-Necesito hablar contigo.
-Belinda no tiene nada que hablar contigo -Habla Emiliano -No voy a permitir que la sigas lastimando
-Tú no tienes ningún derecho a meterte.
Reí -El que no tiene ningún derecho a venir a mi casa eres tú, lárgate ahora mismo. El único asunto en común que tenemos es Aarón.
-Me equivoqué y lo único que quiero es tu perdón.
-Por lo visto viniste a perder el tiempo. Te advertí que nunca te perdonaría.
Fuimos interrumpidos cuando Aarón salió de la casa junto con mi tío. Mi pequeño corrió hacía mi lado y me a abrazo del estómago.
-Mami estás muy gorda.
Reí fuerte -Te extrañé mucho, mi príncipe adorado.
Me intenté agachar para cargarlo, pero Emmi me lanzo una mirada y fue el quién cargó a Aarón para acercarlo a mí.
Lo abrace y deje varios besos en sus mejillas.
-¿Está