Capítulo 27

De forma rápida y somera, contaré que Edna quedó muy sorprendida con toda la historia. Que insistió en pagarme por mis “servicios” pero le decliné con énfasis su oferta. También le pedí que borrara mi número, que nunca más me llamara. A fin de cuentas, llevábamos mucho tiempo sin ser amigas reales.

— Yo le amaba, Ceci. Aún cuando no se excitara sexualmente conmigo, aún cuando fuera un drogadicto de mierda. Le amaba.

— Si tú lo dices. Yo creo que amabas más la idea de que todos los que vimos como te rompió el corazón, lo vieran volver a tus brazos tanto tiempo después. Le dí la espalda y dejé atrás su cuasi-mansión.

Augusto Íñiguez comenzó a ser investigado por la Unidad de Crímenes Especiales de nuestra jefatura. A Horacio Gárciga no le dieron derecho a

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo