Una fiesta en Nueva York...
Dos meses después de la pequeña gira de la princesa de gales, las cosas entre su esposo y ella eran muy confusas, no podía olvidar ese día en Argentina, sabia que era una estupidez enamorarse de ese hombre, pero entonces ¿Por qué cada vez que él la tocaba sentía que su corazón volvía a latir?
-Tenemos que viajar a Nueva York - Luca dio el aviso en la cena semanal de la familia real.
- ¿Puedo saber el motivo? - Alessandro sabía que este momento iba a llegar, al fin y al cabo por eso la había entregado.
- Necesito presentarla como mi esposa - Elena estaba sentada a su lado, pero sentía que era invisible, hablaban de ella como si no estuviera presente.
- ¿Cómo esta tu agenda? - no levanto su mira del plato que tenía enfrente, Luca había observado a su esposa en toda la cena, no había tocado nada de su comida, unos cuantos tragos de agua y unos bocados era todo lo que había hecho ¿Qué demonios le pasaba? ¿ y desde cuando se preocupada por ella?
- No tengo nada,